Canciones para el encuentro

¡Es horrible lo que está pasando! No hacen más que meternos miedo por la televisión. ¿Por qué no hablan de cómo nos están dejando morir?» recuerdo que decía Milagros, a principios de abril, cuando apenas habían pasado unas semanas desde que dejamos de verla una vez a la semana.

Por aquel entonces recomendábamos que no vieran la televisión, pero la mayoría de ellas no tenía otra alternativa para tratar de desconectar y evitar pensar en el impacto que estaba teniendo en sus vidas y en las de su entorno, o conectar con la incertidumbre del qué pasará más adelante o el miedo a ser un número más entre las cifras.

Las situaciones de las mujeres con las que trabajamos son muy diversas, algunas a día de hoy conviven con sus agresores; otras, se encuentran en soledad, y el confinamiento, ese aislamiento necesariamente impuesto, ha provocado que pierdan muchas de las relaciones que tenían previamente, tan importantes para ellas.

La mayoría de nosotras teníamos prácticamente todo lo necesario al alcance de un clic, nos conectábamos para organizar el trabajo, charlábamos con familiares y amistades a través de las pantallas, y cada día que pasaba la oferta cultural y de ocio a través de los ordenadores era más amplia.

La mayoría de ellas tenían algo en común, la dificultad para manejarse con internet o las redes sociales, para muchas totalmente desconocidas.

“¿Escuchas la radio Milagros?” le preguntaba.

“Pongo la radio, para distraerme, pero todo el rato hablan del bicho o ponen canciones de estas modernas, que no me gustan mucho” respondía.

Nos preguntábamos en el equipo qué otras maneras se nos ocurrían para poder hacer que sus día a día no fuese tan terrible, tan desesperanzador, qué podíamos hacer para combatir la soledad que estaban sintiendo, para seguir animándoles y ofrecer, desde el proyecto, acciones accesibles.

Sonia tenía la experiencia del trabajo previo con radios comunitarias, y nos lanzamos así a intentar ver los modos de crear un espacio radiofónico para ellas, una manera de entrar por las ventanas de sus casas en forma de sonidos y letras que a ellas les gustaban. No hubiera sido posible sin tres personas de tres radios comunitarias diferentes: Paco (Radio Enlace), Fran (Radio Almenara) y Álvaro (radio Vallekas), a los que no dejamos de agradecer su tiempo para hacer posible esta idea.

Comenzó como una sorpresa, ellas no sabían qué estábamos haciendo exactamente, y en cada nueva llamada de seguimiento para conocer qué tal estaban dejábamos caer la pregunta “¿Qué canciones te gustaría a ti escuchar? ¿Cuál es tu canción favorita?” 

Así nació «Canciones para el Encuentro», un espacio musical para alegrar la vida de las mujeres maravillosas que nos escuchan, para que ellas no olviden que no están solas y que pronto nos volveremos a ver.

Lo siguiente fue avisarles de que tenían que escuchar la radio a una hora y día determinado:

“Luz, ¿el miércoles podrás poner la radio? Mira a ver si puedes poner Radio Enlace en el 107.5fm a las 12.30h. Tenemos una sorpresa para vosotras”.

“María, si pones Radio Vallekas a las 12.00h en el 107.5 fm el jueves, quizás te sirva para subir ese ánimo”.

Paqui, el viernes tienes una sorpresa en el 106.7 fm, en la radio del barrio, a las 12.30h, no te olvides de poner la radio”.

Ahora el programa va evolucionando, y hemos decidido cambiarle sutilmente el nombre a “Canciones y Voces para el Encuentro”, para poder incorporar otro tipo de contenido que creemos puede gustarles.

Acabo de llamar a Milagros, pero nada más cogerme el teléfono me ha dicho: “Ana, parece que estás despistada, son las 12.00h y ¡estoy escuchando la radio! Me ha encantado la dedicatoria, no tengo palabras para decirte la ilusión que me ha hecho. Pero hablamos luego, no me quiero perder ni un minuto”.

Ana Gil Rituerto
Psicóloga del programa «Hazte Visible, Hazme Visible» de atención a Mujeres Mayores y Violencia de Género de la Fundación Luz Casanova.

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