Mozambique

Mozambique

Entro en las cabeceras de todos los periódicos digitales (los que conozco), uno a uno… El Mundo, El País, La Razón, Público, Abc, el Confidencial…. Nada. Busco entre las noticias: que si lazos de colores, que si qué malos son los de este partido y los del otro qué buenos, que si el Brexit, que si moda, que si toros sí o toros no, que si qué bien le sienta el vestido a aquella y que si quién ganó el duelo de estilos entre la reina frufrú y la princesa yo-qué-sé, mucho fútbol claro… y sólo bajando, bajando, aparece algo pequeño que comenta algo banal.

Nada. Que el tifón Idal ha pasado por Mozambique y que ha dejado como quinientos muertos, que hay más de doscientas mil personas desaparecidas, que ha destruido literalmente medio país y que se ha formado un lago gigantesco en lo que antes era tierra, que no queda nada por allí, que lo que les espera, además de la desesperación por los seres queridos, es el hambre, la miseria, el espanto, y la larga serpiente de enfermedades horribles que acechan entre los muertos sin encontrar aún. Una nimiedad. Como son pobres… Si esto llega a pasar en cualquier país de Europa…pero claro. No es lo mismo.

¿Quién ha corrido para allá inmediatamente? Los de siempre. Misioneros, Cruz Roja, Médicos sin fronteras… los demás no es que seamos malos, es que ni nos enteramos.

Y no solo en España, un amigo francés me confirma que ellos sabían aún menos que yo (y eso que son de origen africano). Que allí solo se habla de chalecos amarillos, de Macron y de duelos de estilo… En España al menos la noticia aparece, que ya es algo. Aunque yo la esperaría en primera página de todos los diarios, manteniéndonos al día, pidiendo solidaridad.

No sé en qué momento puede apearse uno de este mundo, como decía creo que Mafalda o Groucho Marx, o no sé, pero este es uno tan bueno como cualquier otro.

Autoría

  • Belén Martín

    Abogada de profesión y escritora por devoción. Feminista "hasta el infinito y más allá"; optimista, espiritual y soñadora.